Menú

Mercadona


 Mercadona


Actualmente, la mayoría de marcas comerciales llevan a cabo innumerables estrategias en su forma de ofrecer los productos. Por suerte o por desgracia, la mayor parte de la población no se para a pensar en estas cuestiones de marketing y se limita a comprar lo que necesita, lo que desea o lo que estas organizaciones hacen que deseen.
Una empresa en apariencia tan inocente, como puede ser Mercadona, dedicada a la distribución de alimentos y productos de limpieza para el hogar e higiene personal, no escapa de estos hechos de los que hablamos.
Para ponernos en situación, Mercadona es una cadena de supermercados valenciana, compuesta en su totalidad por capital español. Está presente en 46 provincias de 15 Comunidades Autónomas, superando los 1400 establecimientos a finales del pasado año, con un porcentaje del 13,5% en el volumen de ventas totales entre los distintos competidores de este sector. 4,6 millones de familias realizan su compra a diario en estos establecimientos. Viendo estos datos, no debe sorprendernos que Mercadona sea la empresa de supermercados líder en nuestro país, seguida por Carrefour, Día y Eroski.
A diferencia de otras organizaciones, Mercadona ha rehusado dedicarse a la distribución a gran escala, como restaurantes u hoteles, a favor de las familias. Por lo tanto, son las familias, grupos sociales primarios, su principal nicho de mercado. Centrándose en este hecho, han llevado a cabo un gran esfuerzo a la hora de conseguir que haya un supermercado cerca de las familias, lo que explica que prácticamente todos las zonas urbanas cuenten con al menos un establecimiento, siendo común la existencia de varios en la misma ciudad. El número de locales depende, en la mayoría de los casos, del número de habitantes de la localidad. Así, en municipios del sur de Madrid como Valdemoro (70.000 habitantes) podemos encontrar dos Mercadonas.
El público objetivo de esta organización está compuesto por hombres y mujeres de clase media-alta con edades comprendidas entre los 25 y los 50 años. Si bien es verdad, que los jóvenes entre los 18 y los 25 años también acuden a estos supermercados para realizar las compras necesarias para preparar reuniones de amigos, fiestas, etc.

Uno de los principales fuertes de nuestra empresa en cuestión es su marca blanca, una de las mejor valoradas de nuestro país. Dependiendo del tipo de producto, podemos encontrar diferentes nombres: Hacendado (alimentación), Deliplus (higiene personal) y Bosque Verde (limpieza).


Muchos de los productos de Mercadona bajo cualquiera de estas marcas anteriores, son fabricados por empresas conocidas. Así, las pizzas de Hacendado son fabricadas por Casa Tarradellas, las aceitunas rellenas por La Española, la mermelada por Hélios o las salchichas por Campofrío. Pero la cuestión es, ¿cómo consigue Mercadona que empresas tan importantes fabriquen sus productos de marca blanca?
En la mayoría de los casos, porque no siempre es así, Mercadona obliga a estos fabricantes. Se aprovechan de su gran poder de distribución para “chantajear” a estas empresas y conseguir que fabriquen sus marcas blancas. Esta presión por parte de la cadena de supermercados consiste en amenazar con retirar sus productos de todos sus establecimientos si no aceptan las exigencias de Mercadona, lo que supondría unas grandes pérdidas para estos fabricantes, pues las familias que compran en estos establecimientos a diario son muy numerosas y, si no encuentran su producto en la estantería, comprarán otro de otra marca (pocas personas van a ir a otro supermercado únicamente a por ese producto, sobretodo, si es Mercadona el que más cerca se encuentra de su casa).

También cabe destacar la poca variedad de marcas que hay de cada producto, existiendo únicamente la marca blanca y tres o cuatro marcas más, las más solicitadas, a diferencia de otros supermercados donde la oferta para cada producto es mayor, es decir, que hay más donde elegir. Esto condiciona también a las familias a la hora de realizar su compra, puesto que por no tener que ir a otro supermercado, elegirán la marca blanca en la mayoría de los casos (sobre todo en la actual crisis económica) u otra de las marcas disponibles. Esto sucede en las compras diarias, donde la persona encargada de este trabajo en cada grupo familiar va al supermercado más cercano. Los fin de semanas es más común realizar la compra en grandes superficies aprovechando el resto de oferta de ocio de la que se dispone (restauración, cines, tiendas de ropa…), y el hecho de que estas grandes superficies puedan abrir en días festivos, donde el desplazamiento a estos centros comerciales supone pasar un día en familia.

Si nos metemos en la página web de Mercadona, o en cualquier informe de ventas, marketing, etc. realizado por la propia compañía, podremos comprobar que, según estos, los productos pertenecientes a su marca blanca resultan ser los más baratos y los que tienen una mejor calidad en comparación con el resto de marcas blancas. Al menos así lo venden ellos.
La realidad es, que cuando la situación económica es favorable, muy pocas personas se paran a pensar o comparar precios entre distintos supermercados, y la mayoría se creen lo que les cuenta. Pero, en los tiempos que corren de crisis económica, prácticamente todas las familias se fijan bien en estas cuestiones para poder llegar a fin de mes más desahogados.

Y al centrarse en estas cuestiones, es cuando se descubre que realmente Mercadona no es tan barato como nos dicen, ni las calidades son tan buenas como nos venden.
Si bien es cierto que hace unos años esto podía ser verdad, Mercadona ha aprovechado el tirón que han tenido sus establecimientos en toda España, así como su marca blanca, para ir subiendo los precios poco a poco. También han ido ahorrando costes de producción en muchos de sus productos, algunas veces en cuanto al envasado, otras en cuestiones logísticas y, la mayoría de las veces, en la calidad final del producto.

Uno de los casos más llamativos de este “engaño” con los precios tuvo lugar en la última subida del I.V.A. Mercadona hizo una campaña según la cual en sus supermercados no tendría lugar dicho incremento. Sin embargo, durante los meses anteriores fueron subiendo el precio de todos sus productos de manera gradual, poco a poco, para que la gente no se diera cuenta de la trampa. Así, cuando llegó la subida de precios, Mercadona aseguró que en sus establecimientos no tendría lugar, cuando la verdad era que ya la habían llevado a cabo antes de tiempo.

Al contrario que otras cadenas de supermercados como Carrefour, Mercadona no lleva a cabo ninguna oferta en sus productos cuya fecha de caducidad esta próxima a espirar. Resulta curioso este hecho en una empresa que se presenta a sí misma como líder en relación calidad-precio. A diario, toneladas de alimentos son desechados sin ningún tipo de remordimiento, sin pararse a pensar en esta cuestión.
Por otra parte, la oferta de productos sin gluten o lactosa, orientados hacia las personas celiacas o intolerantes a estos elementos, resulta una buena forma de conseguir que estos individuos realicen sus compras en Mercadona, consiguiendo un mayor volumen de ventas en este aspecto con respecto a la competencia.

Otra de las cuestiones por las que destaca Mercadona es la utilización que llevan a cabo de las nuevas tecnologías. Su estrategia publicitaria se centra en Internet, ahorrando mucho dinero al no ocupar espacios televisivos, donde las tarifas son más elevadas. El boca-oído y el hecho de estar presentes en la mayoría de zonas urbanas, cerca de las familias, es otra de sus formas de publicitarse. En este aspecto, la sintonía que suena en los establecimientos cada poco tiempo y que se queda clavada en nuestros cerebros resulta una gran herramienta para darse a conocer, y solo dice: “Mercadona, mercadona”.
En su página Web podemos llevar a cabo diferentes acciones. Podemos hacer la compra sin movernos de casa, lo que para muchas familias supone una comodidad puesto que a lo largo de la semana sus miembros trabajan y no pueden o no les apetece llegar cansados, hacer una lista de la compra y acercarse a los establecimientos, esperando colas, buscando los productos, en definitiva, perdiendo tiempo de sus vidas que quieren dedicar a otras cosas.
En la página Web también podemos conseguir las facturas de nuestras compras, hacernos socios con la tarjeta Mercadona y acceder a la información acerca de la empresa, sus productos, etc.


Cabe destacar el hecho de que puedas enviar tu currículum a través de Internet. En este aspecto, Mercadona es conocida por el buen trato que da a sus empleados, cuyos salarios mínimos superan los de la media de otras empresas. Además, intentan coger a estudiantes universitarios, lo que les permite tener en nómina a personas especializadas en diferentes campos, a las cuales recurrirán si les fuera necesario. Esto, de cara al público ajeno a la empresa, resulta favorable, pues la idea mental que se instala en las cabezas de las personas es de un supermercado en el que se cuida a sus trabajadores y quizá, muchas de ellas se vean motivadas a realizar sus comprar aquí, esperando que el trato hacia los clientes sea igual que hacia los trabajadores.

El servicio de parking gratuito del que disponen la mayoría de establecimientos es otra forma de atraer a los clientes que prefieren ir en coche a comprar, bien sea por comodidad o por no ir cargados del supermercado a su casa.
Para finalizar, Mercadona ofrece una imagen de respeto y cuidado del medio ambiente, tema de mucha importancia en los últimos tiempos en los que el efecto invernadero y el deterioro de la naturaleza están en boca de todos. En este aspecto, la cadena de supermercados se anota otro tanto de cara a su imagen corporativa, aunque, como todas las empresas, sea pura fachada y estrategia para parecer más comprometidos con la causa.

En definitiva, Mercadona se ha convertido en la cadena de supermercados líder en España gracias a sus estrategias de precios bajos, buenas calidades, desarrollo de una marca blanca competitiva, su imagen corporativa de buen ambiente laboral y compromiso ecológico, la oferta de servicios adicionales como el parking y reparto a domicilio y el uso de Internet como herramienta para mejorar sus ventas, aunque, como hemos podido comprobar, muchas veces estas cuestiones resultan no ser tan bonitas como parecen. Todas las estrategias buscan conseguir un máximo beneficio y expansión, tratando de atraer al mayor número de clientes a sus establecimientos a través de las diferentes formas de captación que hemos podido ver, todas ellas presentes en nuestra sociedad, una sociedad de consumo.